La sexualidad no tiene límites: ESI, trabajo sexual y discapacidad

La sexualidad es parte fundamental de la vida. A través de los años, he aprendido que no importa quién seas o cuáles sean tus capacidades, todos tenemos derecho a disfrutarla, expresarla y vivirla con libertad.

Gabierotika

4/5/20251 min leer

La sexualidad no tiene límites: ESI, trabajo sexual y discapacidad

La sexualidad es parte fundamental de la vida. A través de los años, he aprendido que no importa quién seas o cuáles sean tus capacidades, todos tenemos derecho a disfrutarla, expresarla y vivirla con libertad.

Como trabajadora sexual, he visto de cerca cómo las personas con discapacidades enfrentan barreras que van más allá de lo físico. Esas barreras están hechas de prejuicios, estigmas y silencios. Pero también he sido testigo de lo liberador que puede ser un espacio seguro, donde el placer sea legítimo, accesible y respetado.

La Educación Sexual Integral (ESI) tiene un rol crucial en esto. Nos enseña que la diversidad en la sexualidad es natural y valiosa. Hablar de deseos, límites y derechos, sin tabúes, empodera a las personas y les permite tomar el control de sus cuerpos y su sexualidad. Para quienes tienen una discapacidad, esto significa no solo acceso a la información, sino también a experiencias que respeten sus necesidades y deseos específicos.

En mi práctica, incluyo esta perspectiva: adapto experiencias, escucho con atención, y ofrezco herramientas para que cada persona explore su sexualidad de manera plena y auténtica. Pero esto va más allá de mi trabajo. Se trata de un cambio cultural que debemos impulsar juntos: comprender que el placer no es un privilegio, sino un derecho.